De replicarse en noviembre el resultado nacional de estas PASO, la relación de fuerzas entre el oficialismo y Juntos por el Cambio quedaría empatada.
Por una diferencia mínima, el bloque del Frente de Todos conservaría su condición de primera minoría, pero se ubicaría más lejos del quorum propio que con la actual composición.
Según los datos del escrutinio al cierre de esta edición, el escenario en la Cámara baja se mantendría como hasta ahora: ningún bloque alcanzaría, por sí mismo, la mayoría (129 diputados). Lo relevante es que, de proyectarse estos mismos resultados en las elecciones generales, el mosaico opositor más crítico del Gobierno pasaría al frente, ya que no solo Juntos por el Cambio engrosaría sus filas, sino que a ellos se sumarían los integrantes del interbloque Federal, los debutantes libertarios comandados por Javier Milei y la izquierda, que también conseguirían más bancas.
Fuente: La Nación