Habrá internas entre Juntos por Entre Ríos y en el socialismo. Entre ambas suman cinco boletas. El Frente de Todos y otras cuatro fuerzas llevan lista única.
Las elecciones primarias de hoy permitirán tener un primer diagnóstico del electorado en Entre Ríos respecto de la gestión del Ejecutivo (nacional, provincial o incluso municipal). Por encima del contenido de las propuestas legislativas en danza, el votante evaluará el rumbo del gobierno nacional y la figura de Alberto Fernández. Es un fenómeno que suele darse en esta instancia, tal como surge de los sondeos de opinión de las consultoras políticas y de las encuestas que manejan las agrupaciones partidarias. La consigna Alberto sí, Alberto no, podría sintetizar de algún modo el patrón ideológico de una elección nuevamente polarizada entre dos fuerzas mayoritarias: el Frente Todos y Juntos por el Cambio.
Quizás sea válido tomar como parámetro de comparación a las PASO de 2017, cuando por primera vez en Entre Ríos se votaba un solo cargo, y al igual que en estos comicios se elegían a los candidatos a diputados nacionales que competían en las generales. La de hoy se presume que será una elección sencilla, y entonces por lógica es probable que la dinámica del escrutinio provisorio pueda realizarse con mayor agilidad.
Si se consideran todas las PASO nacionales, la de hoy será la sexta, teniendo en cuenta que este mecanismo se estableció por ley en 2009, pero recién se llevó a la práctica en 2011. Para los partidos políticos cambiaron las reglas del juego, porque a partir de ese momento era obligatorio presentarse para todos los cargos nacionales, aunque tuviera una sola lista. Lo mismo para los electores, siendo obligatoria la votación nacional.
Si la idea es ser didáctico respecto del mecanismo que tendrán las primarias y lo que se pondrá en juego, lo más adecuado es emplear una analogía futbolera. El que se lleva a cabo hoy es el primer tiempo de una contienda que se definirá el 14 de noviembre. La provincia renovará cinco bancas de diputados nacionales, a diferencia de otras provincias donde se combinan cargos provinciales con provinciales.
En el cuarto oscuro se podrá optar entre 10 boletas, cinco de las cuales participarán de internas. Las tres propuestas de Juntos por Entre Ríos, con tres listas, y las del Partido Socialista, con dos listas.
Las demás fuerzas políticas (cinco en total) se presentarán con una lista única y con boletas de un solo cuerpo.
La mayor expectativa estará puesta en lo que suceda en la interna que tendrá como protagonistas al exministro del Interior, Rogelio Frigerio, y al intendente de Chajarí, Pedro Galimberti. Sin demasiadas diferencias ideológicas, en el campamento de la oposición lejos se estuvo de alcanzar la unidad. Nunca hubo margen para esa posibilidad, ni siquiera cuando el Congreso Provincial de la Unión Cívica Radical (UCR) decidió que el centenario partido continúe siendo parte de Juntos por el Cambio. Posteriormente, los congresales firmaron un acta acuerdo que conformaba el Frente Electoral Juntos por Entre Ríos.
Darío Schneider y Pedro Galimberti. Alianza radical “Construir”
De ese modo se puso en marcha la carrera para sumar adhesiones y capital político con miras a septiembre. De un lado el dirigente identificado con el macrismo, y del otro el sector que se presentó en sociedad bajo la marca Construir.
Frigerio convocó al diputado nacional Atilio Benedetti, referente de la Corriente Illia y tercero en la lista 502 A. Así se aseguró a la figura más conocida del radicalismo, en función en sellar acuerdos con referentes provinciales para fortalecer su propuesta.
Como parte de su estrategia nacional, Frigerio sumó a su propuesta a Marcela Ántola, concejala radical, quien fue bendecida por el senador nacional de la UCR, Martín Losteau.
Se trata de una lista de dirigentes con presencia territorial en el sur provincial, si se tiene en cuenta que Benedetti es oriundo de Larroque y Frigerio fijó domicilio en la localidad de Villa Paranacito.
Más allá de las chicanas de ocasión con sus adversarios, el radical Galimberti se enfrenta al mayor desafío de su carrera política. Su apuesta consiste en devolverle protagonismo al radicalismo, con base en la legitimidad de gestión municipal y de los intendentes que lo acompañan en esta patriada.
Pero su objetivo de fondo es instalar su propuesta para 2023, cuando en la provincia se deba elegir al nuevo gobernador. En el mismo proyecto se embarcó Frigerio, que después de varias idas y vueltas, parece estar convencido de dar esa pelea dentro de dos años.
En la interna también participará una tercera lista, que encabeza al exconcejal varisquista Carlos González, con acompañamiento de dirigentes radicales de Paraná.
El FdT con lista única
La expectativa del Frente de Todos en Entre Ríos está asociada directamente a la evaluación que el electorado pueda hacer al momento de votar respecto de la gestión del gobernador Gustavo Bordet. Su carta en esta elección es Enrique Cresto, un dirigente surgido de las filas del peronismo de Concordia y quien encabeza la lista de prencandidatos para llegar al Congreso de la Nación. El gobierno provincial con Bordet y la vicegobernadora, Laura Stratta, le pusieron el cuerpo a la campaña, entendiendo que la elección será la primera encuesta respecto de la gestión del Ejecutivo provincial. Claro, también será una evaluación de las políticas nacionales ejecutadas por el presidente Alberto Fernández en el marco de una pandemia inédita y con la cual debemos seguir conviviendo.
Cresto es otro de los aspirantes a llegar a la Casa de Gobierno, por eso esta elección podrá posicionar o no haciendo proyecciones con miras a 2023.
Otro de los frentes con puja interna será el socialismo: la contienda será entre Juan Rossi y Juan Carlos Meillard. La oferta electoral provincial la completarán el MST (Nadia Burgos), el Partido Conservador Popular (Miriam Müller), el Partido Fe (Lucía Varisco) y el Nuevo Mas (Federico Demarchi).
Fuente: DiarioUno