La periodista Marcela Ferreirós, de la costa del Uruguay, contó a La Cúpula, que “esta veda ha llevado a que la población no esté tan involucrada en el proceso como en otras ocasiones. Los actos políticos han tenido menos asistencia y el entusiasmo por la elección parece ser más bajo de lo habitual”.

Por otro lado, Ferreirós, dice que “la incertidumbre económica ha llevado a que los productos escaseen en las góndolas y los precios suban rápidamente, lo que afecta la economía de las familias. Los uruguayos, que acuden a Entre Ríos para alquilar propiedades, han aumentado la demanda de viviendas, generando un desafío en el mercado de alquileres que antes estaba orientado al turismo”.

La emergencia habitacional es un problema creciente en la provincia. “La falta de oferta de alquileres permanentes, que se han convertido en temporales o destinados a los uruguayos que pagan en dólares, ha dejado a miles de familias sin opciones para mudarse. En Colón, por ejemplo, se han presentado cuatro proyectos distintos de emergencia habitacional, mostrando la gravedad de la situación. La ciudad se ha convertido en un destino de uruguayos que alquilan en dólares, lo que hace que los alquileres sean inaccesibles para los locales” dijo la periodistia

En medio de este escenario complejo, las elecciones provinciales de Entre Ríos se presentan como un desafío. La veda electoral, que busca fomentar la reflexión del electorado sin la influencia de la propaganda política, ha llevado a una disminución del interés en la población. Los candidatos han tenido dificultades para atraer multitudes a sus actos, y la falta de entusiasmo se hace evidente.

“En cuanto al escenario político, se percibe una tendencia hacia la disrupción. Los candidatos de la continuidad enfrentan un mayor desafío para mantener el interés de la población, mientras que los candidatos disruptivos ganan terreno. La polarización tradicional en la provincia parece estar cambiando, y la compatibilidad con diversas opciones se vuelve crucial” afirmo Marcela.