Las flores amarillas son un regalo tradicional en primavera, ya que esta estación se asocia con la renovación, el crecimiento y la alegría. El color amarillo simboliza la luz del sol y la vitalidad, lo que lo convierte en una elección popular para representar la primavera. Además, muchas flores amarillas, como los tulipanes y los narcisos, florecen durante esta época del año, lo que las hace disponibles y frescas para regalar. De esta manera, obsequiar flores amarillas en primavera se convierte en una forma de celebrar la belleza y el renacimiento de la naturaleza en esta temporada.

En el mes de septiembre, cientos, si no miles de mujeres, en su gran mayoría en México, esperarán ansiosamente recibir las tan anheladas flores amarillas. El llamativo color de estas flores representa la amistad en su máxima expresión y, al mismo tiempo, transmite optimismo y energía. Es un gesto que se suma a la celebración de la primavera y de la conexión entre personas que desean expresar afecto y buenos deseos en esta temporada.