Cómo convertir tu viejo celular en una cámara de seguridad
18/09/2022 Tecno

Cómo convertir tu viejo celular en una cámara de seguridad

No tires tu celular sin uso: si todavía funciona, podés reutilizarlo para vigilar tu casa desde cualquier lugar del mundo.

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Casi todos tenemos al menos un celular que dejamos de usar cuando lo cambiamos por uno nuevo y quedó en el olvido en algún cajón de casa. Si todavía funciona, podés darle una segunda oportunidad como cámara de seguridad.

Ese viejo smartphone que nadie de tu familia o amigos quiso, que no pudiste vender o te da lástima tirar, puede servir como un dispositivo de vigilancia casero. Acá te contamos cómo convertirlo en una cámara para observar tu casas desde cualquier lugar del mundo en tres simples pasos.

Una de las formas más útiles de reciclar un viejo smartphone es convertirlo en una cámara de seguridad para el hogar. Pero no te asustes, no es necesario ser un experto o un técnico de video para poder hacerlo. Primero, verificá que todavía funcione y luego seguí este breve tutorial.

1. Buscá una app de cámara de seguridad
Tanto en el Google PlayStore como en el App Store de Apple, hay varias aplicaciones de circuito cerrado o de cámara de seguridad. Algunos ejemplos son Alfred Camera, Presence, Manything, Security Camera y Camy.

La mayoría de estas aplicaciones ofrecen las mismas funciones: streaming local y a través de la nube, grabación y almacenamiento de imágenes en el dispositivo o de forma remota y la detección de movimiento y las alertas.

Algunas de estas apps también pueden grabar con ambas cámaras (frontal y trasera) y permiten acceder a controles como acercamientos.

2. Instalar la aplicación y configurarla
Una vez descargada la app en ambos smartphones (el nuevo y el viejo) deberás iniciar sesión y configurarlas.

Primero tendrás que ingresar con una cuenta, por ejemplo de Google, en las aplicaciones. De esa manera se sincronizarán ambos dispositivos.

Generalmente estas aplicaciones tienen seteos muy simples, intuitivos y fáciles de entender, como por ejemplo activar la detección de movimiento, elegir entre las cámaras delantera y trasera, y activar o desactivar el audio.

Otras opciones que podrás configurar son la habilitación de enfoque continuo (para que no haya objetos borrosos), establecer una resolución de grabación o habilitar un bloqueo con un código para que nadie más pueda acceder a la cámara.

Desde el smartphone principal también podrás hacer más ajustes como activar o desactivar las notificaciones, establecer el nombre de una cámara, añadir a otras personas para que tengan acceso a los videos, chequear si se ha desconectado la cámara, establecer la sensibilidad de la detección de movimiento y activar un filtro de baja luminosidad por si el ambiente que estás vigilando no tiene buena luz.

3. Elegir el lugar para ubicar la cámara y montarla
Una vez que te hayas asegurado que ambos smartphones están sincronizados y la transmisión de imágenes funcione sin problemas, el siguiente paso es encontrar una buena ubicación para la cámara.

Las opciones son infinitas: puede ser un lugar desde donde se vea la entrada a tu casa, en una ventana que de al patio, o en un sitio donde puedas ver el lugar donde guardás tus objetos de valor o apuntando a lo que desees vigilar, como por ejemplo donde duerme tu mascota.

La mayoría de las aplicaciones de este tipo soportan varias cámaras, por lo que si tenés un par de smartphones sin usar, podés configurar varios dispositivos en tu casa y tener una vigilancia completa del hogar.

Consejos para montar el celular-cámara
Para colocar la cámara deberás tener un cuenta un par de cuestiones de vital importancia:

1. El sitio debe ser seguro y estable. No es recomendable dejar la cámara a la intemperie o en superficies donde ante el menor movimiento el celular se caiga.
Un pequeño trípode o soporte para celular sirve para mantener el dispositivo seguro y a prueba de caídas. También es fundamentar ubicarlo en un lugar discreto.
2. Deberás ubicarlo cerca de una fuente de alimentación eléctrica. Sí, próximo a un enchufe.

La cámara encendida y la transmisión de video consumen mucha energía. Si a eso le agregamos que un celular viejo no suele tener mucha autonomía, si no lo conectás a la corriente no va a durar encendido mucho tiempo.

Para que el celular y la cámara estén encendidos las 24 horas del día deberás enchufarlo, a través de su cargador, a una fuente de energía. Si no tenés un enchufe cerca de donde necesitás ubicar la cámara, existen cables para cargar los celulares de hasta 3 metros (¡incluso hay de más extensión!). Con uno de ellos obtendrás flexibilidad para ubicar la cámara casi donde quieras.

Otros consejos para convertir un celular en una cámara de vigilancia
Por último, para ampliar el campo de visión de la cámara de tu teléfono viejo, podés agregarle un objetivo -lente-, gran angular para tu teléfono. Y para obtener mejor sonido, también podrás conectarle un micrófono que esté en otra parte de la casa y capture sonidos que el celular no pueda.

Con este truco, sin gastar en costosos equipos extra, podrás controlar una cámara de seguridad desde tu nuevo teléfono y vigilar tu casa desde cualquier lugar del mundo