Mientras el intendente de Paraná, Adán Bahl, celebró el éxito de la agenda cultural en distintos puntos de la ciudad, los paranaenses sufren una vez más un corte de agua por la rotura de un caño maestro.

Desde 2017, se registran cortes en la ciudad debido a la rotura del caño maestro y fueron pocas las veces que la Municipalidad dio aviso a los vecinos de forma oficial de este inconveniente que afecta de forma directa a la vida diaria.

Las roturas registradas se dieron en las zonas de: calle Espejo y Crauzas; calle Rondeau y Camino Costero; calles Rondeau y Echeverría; calle Rondeau y Raúl Uranga y las más recientes en calle Rondeau al final. El patrón aquí es evidente y muy claro. Es el mismo caño maestro el que afecta a la zona. El Viernes Santo, el personal de Obras Sanitarias de la Municipalidad “debió presentarse en la salida de una toma de agua y se advirtió la posible baja de presión o suscitarse cortes parciales”.

Una fuente indicó a El Explorador que los empleados “deben emparchar de a tramos” el caño maestro, y agregó que “las reparaciones no duran y queda como que ellos hacen mal los arreglos y en realidad lo hacen con lo que le dan para emparchar”.

En esta línea, la fuente explicó a este medio que “los caños en realidad deben cambiar en todo su tramo porque, incluso donde arreglan un tramo, luego se dará en otro. Y más aún cuando no controlan la presión de agua al momento de abrir las llaves”. Tras ser consultada por la falta de reparación completa del caño maestro, en lugar de repararse y emparcharse por trozos, la fuente respondió: “Son obras que no se ven, no compran intenciones electorales, se menciona en los pasillos cuando se toca el tema de cambiar toda la cañería. Hacen una lectura errónea de lo que significa solucionar el tema del agua”.

Las constantes fallas del servicio de agua potable se resienten en los vecinos que deben racionar el uso, la consulta es: ¿Qué se ve en las facturas? Ante la falta de suministro de agua potable, ¿corresponde descontar al vecino en la factura? ¿Qué hacen los paranaenses hasta entonces?

El pasado viernes 8 de abril, hace exactamente ocho días, la Municipalidad restringió el servicio en diversas zonas de la ciudad por la reparación de una cañería en el centro de distribución Lola Mora. El arreglo finalizó a mitad de esa mañana, casi al mediodía, pero muchos hogares en la ciudad no cargaron sus tanques de agua sino hasta el final del día sábado. La semana anterior a esa, 31 de marzo, por mejoras en la red de agua se vio afectado el servicio de agua potable. Si bien se realizan reparaciones constantes, el problema es más profundo, pues este inconveniente es cotidiano para los vecinos de la ciudad.

El 22 de Marzo, Día Mundial del Agua, Adán Bahl twitteó lo siguiente: “reafirmamos nuestro compromiso con el acceso universal al servicio y con el cuidado del recurso hídrico. En Paraná reactivamos el Plan Director de Agua con soluciones estructurales y definitivas que garantizan este derecho fundamental. (…) Trabajamos para que el agua llegue a cada familia.

Tenemos el privilegio de ser una ciudad costera, atravesada por arroyos, por eso planificamos una Paraná sostenible de cara al río, que preserve este recurso tan valioso y esencial para la vida”.

Contrario a lo que afirmó el presidente municipal, muchas casas están sin agua o apenas cargando sus tanques, viendo resentido el uso del derecho al agua potable que se abona en los impuestos.